09 de abril, 2019 21:01
00:00 / 57:46
35 reproducciones
Queridas y queridos oyentes. Me permito recomendarles esta serie de 3 capítulos que se inician aquí. Creo que son los mejores programas que hice hasta este momento. Espero que los disfruten. "Como algunos de ustedes sabrán, este punto de encuentro entre la radio y los libros no es un espacio de crítica literaria, sino una iniciativa para compartir con ustedes el placer de mis lecturas del género policial realista, desarrolladas durante más de tres décadas. Por supuesto que en mi gusto personal se basa en elementos de juicio que me llevan a construir opiniones y criterios personalísimos, que me sirven de guía en el momento de seleccionar mis lecturas. Uno de esos parámetros, al que le doy bastante importancia, es que, en principio, no me interesan las narraciones sobre asesinos sicópatas ni las que abundan en descripciones detalladas de torturas, profusión de sangre y derramamiento de vísceras. Sin embargo, mis juicios no son rígidos, a veces un autor atraviesa esa barrera que yo tengo como lector y me demuestra, a fuerza de talento, que vale la pena leer su obra pese a estas particularidades que, en principio, me desagradan. Esta reflexión viene a cuento porque no voy a dedicar uno, sino varios capítulos de este programa, a un autor que escribió una larga serie de libros en cuyos volúmenes iniciales ocupan un lugar destacado varios asesinos sicópatas y que, en especial en su primera novela, incluye desollamientos y detalladas descripciones de tormentos y crueldades varias que me siguen pareciendo innecesarias. Vale aclarar que, a medida que el ciclo avanza, los sicópatas dejan de ocupar un lugar preeminente y el desborde de sangre y vísceras se modera, lo que a mi entender contribuye a mejorar su obra. Pero para no extenderme más, este capítulo 78 de “El dulce veneno de la novela negra” está dedicado a John Connolly y su personaje, Charlie “Bird” Parker." Gabriel Marcelo Wainstein. Leer más
Queridas y queridos oyentes. Me permito recomendarles esta serie de 3 capítulos que se inician aquí. Creo que son los mejores programas que hice hasta este momento. Espero que los disfruten. "Como algunos de ustedes sabrán, este punto de encuentro entre la radio y los libros no es un espacio de crítica literaria, sino una iniciativa para compartir con ustedes el placer de mis lecturas del género policial realista, desarrolladas durante más de tres décadas. Por supuesto que en mi gusto personal se basa en elementos de juicio que me llevan a construir opiniones y criterios personalísimos, que me sirven de guía en el momento de seleccionar mis lecturas. Uno de esos parámetros, al que le doy bastante importancia, es que, en principio, no me interesan las narraciones sobre asesinos sicópatas ni las que abundan en descripciones detalladas de torturas, profusión de sangre y derramamiento de vísceras. Sin embargo, mis juicios no son rígidos, a veces un autor atraviesa esa barrera que yo tengo como lector y me demuestra, a fuerza de talento, que vale la pena leer su obra pese a estas particularidades que, en principio, me desagradan. Esta reflexión viene a cuento porque no voy a dedicar uno, sino varios capítulos de este programa, a un autor que escribió una larga serie de libros en cuyos volúmenes iniciales ocupan un lugar destacado varios asesinos sicópatas y que, en especial en su primera novela, incluye desollamientos y detalladas descripciones de tormentos y crueldades varias que me siguen pareciendo innecesarias. Vale aclarar que, a medida que el ciclo avanza, los sicópatas dejan de ocupar un lugar preeminente y el desborde de sangre y vísceras se modera, lo que a mi entender contribuye a mejorar su obra. Pero para no extenderme más, este capítulo 78 de “El dulce veneno de la novela negra” está dedicado a John Connolly y su personaje, Charlie “Bird” Parker." Gabriel Marcelo Wainstein.